lunes

Basta con verse al espejo.

Las familias actuales han mutado en una sumatoria de individualidades. ¿Por qué digo esto? Ahora leerán…
En épocas de mi niñez (hace más de tres décadas para los que no me conocen) el concepto de familia estaba sostenido por una imagen paterna, otra materna y los hijos completando el cuadro. Apoyado en este concepto podría afirmar que el hecho de pasar un día en familia significaba compartir tareas grupales dentro o fuera de la casa. Pero… ¿qué pasa hoy?
Hoy, con el avance de las familias alternativas (llámese así a las producidas por la separación de los padres, la formada por homosexuales o las que tienen más madres que padres) el pensar en pasar un día en familia a variado sustancialmente, ya que esto implica combinar horarios con la ex mujer, el novio de la ex mujer, la novia del padre y las actividades del hijo menor con las del hijo mayor que habitualmente no coinciden.
Es muy factible que al ocurrírsele a uno pasar un día familiar deberá lidiar con toda una serie de circunstancias que harán de esto una idea casi utópica.
Mientras la madre disfruta un día en el club con su novio, el padre pasa a buscar a sus hijos con la idea de compartir momentos familiares que nunca llegarán, porqué ni bien llega a la casa de sus hijos deberá despedir al hijo mayor que irá a pasar un día de pileta con la novia y sus amigos.
Pero no está todo perdido…, aún queda el hijo menor para disfrutar de un sábado espectacular (aunque no sea en familia).
Sabiendo que estamos en el siglo XXI y que los niños de hoy tiene múltiples actividades éste buen hombre debería haberse imaginado que la idea duraría hasta que el pequeño le diría que hoy tiene partido en un club muy lejano y que lo llevarían desde la puerta del club de fútbol en micro y que además al regresar se iría con el padre de un compañerito porqué está invitado a su cumpleaños, que como es un pijama party terminará al día siguiente.
Como la idea estaba presentada para pasar un día con lo hijos, la novia del padre había programado una salida con amigas, y entonces el padre con la sola compañía de un americano cortado, espera terminar de leer el suplemento cultural del día para volver a su casa cansado de esperar que el tiempo pase aunque más no sea para dejar de aburrirse.
Adolescentes en grupos, madres con novios, padres sin novias en bares literarios y niños en cumpleaños…
Ahhh… que lindo día en familia… En fin… las familias cambiaron… han pasado de ser familias a individuos familiares. Por eso hoy en día basta con verse al espejo para pasar un día en familia.

Chau… saludos a mi familia. (si la ven)

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